Mami siempre ha dicho que las sombrillas abiertas
bajo techo traen mala suerte y atraen rayos. Y no podría ser de otra manera. ¡Qué
buena suerte puede tener una familia estafada, dos veces!¡Mal rayo les parta! No
bastó con que las mantas de impermeabilización fueran sustraídas de alguna
construcción estatal, o que el gas para el trabajo tenga que ponerlo el
cliente, o que el precio final sea una exorbitante cifra en CUC.