miércoles, 6 de abril de 2016

Desubicados




Apenas se tiene un pie dentro de la Universidad, la incertidumbre sobre el futuro laboral persiste casi hasta la fecha misma de graduación. Lo digo por experiencia propia. A mi llegaron a dibujarme la posibilidad (real) de trabajar como maestro en algún centro educativo, fuera incluso de la enseñanza superior. “Será donde el país los necesite”, nos decían de forma lapidaria.

Con esos truenos, imaginen el desconcierto. El destino de quienes apostamos por estudiar Periodismo no lo determinaban las decisiones ni el desempeño docente del alumno. Las aspiraciones personales carecían de valor ante la estrechez arbitraria de las opciones.