Algunas estrellas de Latinoamérica |
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viernes, 27 de junio de 2014
Mundial 2014: La decepción europea, el orgullo latinoamericano y el extremismo de la FIFA (+Estadísticas)
martes, 24 de junio de 2014
Por fin, un hotel para los universitarios…………………… de otros países
Este
viernes descubrí en el semanario Girón,
que por casualidad llegó a mis manos, una noticia asombrosa: El hotel Sun
Beach de VARADERO
propone este verano una oferta exclusiva para el mercado
juvenil el Club Universitario Bellamar, un hospedaje para jóvenes de Cuba y
el resto del mundo.
Ansiosa
por encontrar más detalles, porque créame estas noticias son únicas, e
ilusionada porque definitivamente podrían los más noveles conocer ese otro
pedazo de Cuba o tal vez un pedazo de
esa otra Cuba, continué leyendo.
domingo, 15 de junio de 2014
Solo un hombre para ser feliz: papá
El
día que supo mi sexo seguramente papá hizo es mueca que se le dibuja en el
rostro cuando no está conforme con algo. Conmigo su anhelo de tener un varón a
quien llamarle José, se fue a bolina.
Para
colmo por la edad era el último hijo que mamá
debía tener. Cuenta ella que siempre tuvo un bate y pelota guardados, por si
acaso. Tal vez ese es el motivo por el cual las fotos mi hermana
Ara incluyen hasta casco.
Pero
su propia genética le negó el varoncito que esperaba, porque sí, son los
hombres quienes determinan el sexo del bebé durante la gestación, aunque como a
mi padre, a algunos les cueste creerlo. No bastaron sus ganas inmensas de tener
descendencia masculina, pero tampoco le hizo falta.
jueves, 5 de junio de 2014
La verdadera historia de los cocheros de Cienfuegos (+Audio)
Amados y odiados por la misma gente, por aquella relación que minimiza con ellos los problemas de transporte, y maximiza el gasto de dinero en el traslado rápido hacia cualquier lugar, los cocheros fueron centro de atención a inicios de esta semana, cuando en un acto de inconformidad con nuevas medidas a aplicar, algunos cesaron sus labores durante la jornada del lunes.
domingo, 1 de junio de 2014
Los niños más felices del mundo viven en Cuba
Yo no sé si fue el Período Especial,
la entrada al nuevo milenio, pero no me puedo quejar de mi infancia.
Es cierto que casi todas mis muñecas fueron
las mismas que mi hermana mayor había cuidado tanto y que unos años antes de yo
nacer la mediana dejó sin pelos, pero fui feliz con aquellas “medio calvas” que
nada tenían que ver con las barbies, -aunque
de estas otras también tuve-.
No sé si fueron aquellos juguetes de “afuera”
que mi vecino repartió a los niños del barrio cuando entraba en los veinte; o
los muñequitos rusos, que eran de allá, aunque fueran de otro país. No sé qué
sería, pero tuve una infancia de la que no me puedo quejar.