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miércoles, 11 de julio de 2012

La pasión del Yuly (entrevista a Yuliesky Gourriel)

 Antes de que me hiciera periodista, o tan siquiera tuviera la carrera en mis manos, Yuliesky Gourriel, el Yuly como le dice todos, accedió a darme esta entrevista recién llegado del primer clásico mundial de béisbol. Contrario a lo que decían de él, el Yuli accedió amablemente y me habló con mucha cordialidad.


Sus excelentes resultados en el béisbol no son solo causa de la pasión deportiva que heredó de su padre. Su reconocimiento a nivel mundial y el amor que le profesan varios millones de cubanos, no son el producto de una cara bonita o de un apellido de renombre. Su popularidad no está dada por la persecución de los medios. Simplemente Yulieski Gourriel Castillo, ha sabido ganarse a todo un pueblo  por su desinterés, su cubanía y su entrega al deporte nacional, esa que le inculcaron desde pequeño en su natal Sancti Spíritus.

“Comencé a jugar pelota a los siete años en la escuela Julio Antonio Mella, de mi provincia. A los nueve, entré en el área deportiva con el entrenador Pablo Cepeda. Luego cursé  la secundaria básica en la Escuela de Iniciación Deportiva Escolar (EIDE) e integré los equipos nacionales escolares que se formaron hasta llegar a los juveniles.”
Lourdes (I), Yunieski, Yulieski y Yunito (D)
Seguidor de los pasos beisboleros de su padre Lourdes Gourriel Delgado (gloria de nuestro deporte nacional, querido y conocido por sus oportunos batazos), “El Yuly”, como lo conocen todos, marcó su debut en el año 2002, el la XLI Serie Nacional como antesalista de los Gallos espirituanos, donde además comparte nómina con su hermano mayor Yuniesky, jardinero central. (Hoy en día también juega su hermano menor Lourdes Yunielky, a quien cariñosamente dicen Yunito):
“Compartir equipo con mi hermano me da mucha confianza. Nos apoyamos mucho en todo y siempre estamos aconsejándonos en los juegos y aunque mi papá nos presiona un poco, ha sido desde pequeño mi entrenador y guía y tengo que agradecerle todo lo que sé. De alguna forma, creo que esa presión hace que la relación entre los tres sea bastante buena y que los resultados sean más satisfactorios. Además compartimos muchas cosas y eso hace que nos compenetremos mucho más y que la relación de padre a hijo y de pelotero a entrenador se consolide”
Integrante del equipo Cuba en diversas ocasiones, ha participado en importantes citas deportivas como los Juegos Olímpicos Atenas 2004, Panamericanos Santo Domingo 2003 y Centroamericanos Cartagena de Indias, Colombia 2006, así como también el Preolímpico de Las Américas Cuba 2006. Aunque, su más importante evento había sido el Primer Clásico Mundial de Béisbol celebrado en  Puerto Rico y Estados Unidos en  marzo de 2006.
“Los jugadores eran muy famosos, profesionales y de muy buena calidad. Era la primera vez que el equipo Cuba se enfrentaba a peloteros de ese nivel. Jugar con estrellas de Las Grandes Ligas fue una experiencia única. No voy a olvidar nunca una conversación que sostuve con Albert Pujols (primera base del equipo de Dominicana) donde conversamos mucho y hasta me contó algunos de sus secretos. Creo que  participar en Clásico ha sido lo mejor que me ha ocurrido en mi carrera”
 Como muestra de su calidad defensiva fue elegido como el camarero del Todos Estrellas superando a figuras del béisbol profesional como Alex  Cora.
“Confieso que me sentí bien en segunda, aunque estaba un poco preocupado porque regularmente juego más en tercera y es en esa base donde me siento más cómodo. Ese premio me llena de orgullo porque allí habían muy buenos jugadores en esa posición”
Los Gourriel con su padre de pie, aconsejándolos
Poner resultados de por vida y en la última serie nacional, Yuliesky confiesa  que las cosas que ha logrado en su carrera le han costado sacrificio.
“Me gusta ser un jugador versátil, que pueda jonronear y robar bases, y creo que de alguna forma eso me lo ha inspirado mi padre pues me inculcó el ejercicio físico desde chiquito.”
Su jugador favorito y héroe personal es su papá, pero Yuly  no puede evitar, por su rendimiento deportivo, el ser a menudo comparado su progenitor y otros grandes del béisbol cubano.
“No me gusta que me comparen con ningún pelotero, aunque, eso constituye un reto para mí: me inspira y me da muchas fuerzas para esforzarme más, pero creo que aún me falta mucho para llegar a ser como mi padre, Linares y otros. A veces la gente me pide mucho y eso me crea un poco de presión. A penas llevo pocos años en el béisbol y no pienso conformarme con nada. Siempre trataré de alcanzar todo lo que pueda sin rendirme para dar lo mejor de mí a la afición y quedar bien conmigo mismo”
Pero Yuliesky, además de excelente deportista, es también un joven que disfruta de sus ratos libres, los que combina para hacer las cosas que le gustan y para resistir el “asedio” del público y la prensa.
“Aunque el béisbol me gusta muchísimo, también disfruto practicar otros deportes, escuchar música, (especialmente reguetón), ir a las fiestas, divertirme, estar con mis amigos etc. Pero   te confieso que prefiero compartir con mi familia, y celebrar con ellos los triunfos. Mi casa es el lugar donde logro descansar, aunque también tengo que atender a los periodistas y al pueblo que me busca para tirarse fotos o firmar autógrafos. Tengo muchas cartas que me han escrito y siempre trato de leerlas todas. Es bueno saber que la gente te quiere y eso me enorgullece mucho.”
Este espirituano de 26 años,  que a pesar de su juventud ha sabido consagrarse con el béisbol cubano y convertirse en un jugador de tacto, fuerza y velocidad muestra a cada instante su orgullo de ser cubano
‘La combatividad es lo que nos caracteriza a nosotros. Creo que con esa agresividad del equipo Cuba en eventos internacionales para poner bien alto las cuatro letras de nuestro uniforme podremos continuar cosechando triunfos y dar el espectáculo que se merece el aficionado cubano”.
Yulieski Gourriel Castillo, “El Yuly” para el mundo, es un jugador de las grandes ligas cubanas como el mismo se auto tituló.  El amor que le profesa a  su tierra querida lo hace dar lo mejor en el terreno, y aunque han sido muchas las propuestas que ha recibido para abandonar su país, comparte las palabras de su compañero de equipo y amigo personal Frederich Cepeda:”El béisbol es un deporte no una mercancía (…) y no se juzga por el precio de los atletas y sí por el corazón de las personas.
“Tengo una familia a la que adoro, un Comandante y un pueblo que me quieren. Eso lo desea todo el mundo, pero, simplemente, no tiene precio”


Vea las estadísticas de Yulieki aquí.




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